En este artículo se presentan los requisitos que deben cumplir las empresas legales del ámbito privado, los empleadores individuales, las personas que realizan actividades comerciales y los trabajadores autónomos para inscribir a sus empleados en la Administradora de Riesgos Laborales correspondiente.
El sistema general de riesgos laborales comprende un conjunto de entidades y normativas, tanto públicas como privadas, cuyo propósito es prevenir, proteger y atender a los trabajadores ante enfermedades y accidentes derivados de su labor.
Una de las características fundamentales de este sistema es que las entidades administradoras se encargan de gestionar la afiliación y administración del mismo. Además, las disposiciones de salud ocupacional relacionadas con la prevención de accidentes laborales y enfermedades, así como el mejoramiento de las condiciones laborales, forman parte esencial de este sistema.
A continuación, se detallan los documentos necesarios para la afiliación a la ARL según el tipo de entidad:
Empresas legales del sector privado: Fotocopia del RUT, del documento de identidad del representante legal y certificado de la cámara de comercio expedido en los últimos noventa días.
Empleador individual: Fotocopia del documento de identidad del empleador y del trabajador, así como la afiliación al régimen contributivo de salud y pensiones.
Personas que realizan actividades comerciales: Fotocopia del RUT, del documento de identidad del representante legal y certificado de la Cámara de Comercio expedido en los últimos noventa días.
Trabajadores autónomos: Copia de la cédula de ciudadanía, contrato de prestación de servicios y afiliación al sistema de salud y pensiones del régimen contributivo.
Es importante recordar que la ARL debe expedir un carné a sus afiliados, incluyendo información como el nombre de la administradora, del afiliado, de la empresa y un número de servicio al cliente disponible las 24 horas del día.
Finalmente, las entidades administradoras no pueden rechazar la afiliación de pequeñas empresas ni de empleadores de servicio doméstico. Cualquier conducta contraria a esto podría acarrear multas significativas.
