Para llevar a cabo un adecuado análisis es imprescindible emplear métricas financieras. Estas se derivan de la información contenida en los estados financieros, proporcionando datos que aclaran la situación de la empresa y facilitan el inicio de la toma de decisiones. “las habilidades que las empresas buscan en los consultores son la capacidad de presentar información relevante de manera práctica y sencilla, que sea fácil de entender para los directivos”
En la actualidad, diversos profesionales están incursionando en el ámbito de las finanzas y la economía con mayor fuerza que antes, esto se debe a que en la era de la información, y en mercados tan competitivos como los actuales, se requieren estrategias sólidas para destacarse. Entre otras cualidades de gran importancia, una de las habilidades que las empresas buscan en los consultores es la capacidad de presentar información relevante de manera práctica y sencilla, que sea fácil de entender para los directivos y les permita desarrollar estrategias y planes de acción que se alineen con la misión de la compañía.
Análisis externo e interno de la compañía
Para llevar a cabo un análisis financiero
se debe considerar tanto el análisis externo como el análisis interno. En cuanto al análisis externo, existen numerosas variables que pueden generar niveles elevados de riesgo que pongan en peligro la continuidad del negocio, por lo tanto es necesario recopilar información de diversos factores como: la situación política y económica del país; el entorno ambiental; la sociedad, entre otros, que permiten a la administración tener una visión general de las circunstancias y determinar qué fortalezas y amenazas deben abordar para respaldar la ejecución de las operaciones de la empresa.
Otro aspecto importante a evaluar es el mercado en el que opera la empresa. Dado que este mercado está en constante cambio, es crucial dedicar esfuerzos para analizar la estrecha relación que existe entre las empresas del mismo sector y extraer de ellas datos y resultados que permitan realizar comparaciones para medir la productividad, rentabilidad, solvencia, eficacia y otros criterios de la empresa objeto de estudio, los cuales deben medirse a través de métricas financieras y serán fundamentales para definir planes de acción.
Para iniciar el proceso de análisis interno, es necesario investigar diversos aspectos de la empresa como: su propósito social; misión; visión; organigrama; las funciones de cada área, y el manual de funciones de cada cargo, para identificar una estructura completa y posteriormente revisar la información presentada en las actas de socios, informes de auditores externos y, principalmente, en los estados financieros, ya que a través de sus distintos elementos (como
el activo, pasivo, patrimonio, gastos, costos), proporcionan la información necesaria para elaborar diversas métricas financieras.
La utilización de métricas financieras
Existen diversas métricas financieras
que nos permiten evaluar detalladamente la situación de la empresa. La ventaja de utilizarlas radica en que ayudan a interpretar los resultados de la empresa y permiten realizar comparaciones con resultados de otros periodos, de otras empresas y del sector en general.
A continuación, analizaremos las métricas más conocidas en la gestión financiera (recuerde que cada empresa puede utilizar las métricas que considere pertinentes e incluso crearlas si es necesario).
Métricas de solvencia
La solvencia se evalúa por la capacidad que tiene la empresa de pagar las deudas adquiridas a corto plazo, es decir, la solidez con la que cuenta para cumplir con sus obligaciones. Algunas métricas de solvencia
son:
Métricas de operatividad
Las métricas de operatividad sirven para medir el tiempo que tardan diferentes cuentas en convertirse en efectivo. Un ejemplo para simplificar esta definición y comprender la importancia de la información que se genera en esta métrica sería la evaluación de inventarios: que el inventario se convierta rápidamente en efectivo es útil ya que es diferente que un inventario se venda rápidamente y genere un recurso de efectivo disponible, a que este inventario permanezca en el almacén por mucho tiempo y no se pueda contar con ese ingreso de dinero. Es importante destacar que las métricas varían según la actividad de la empresa y, por lo tanto, deben compararse con periodos anteriores y con el sector en el que se encuentra. Algunas métricas de operatividad son las siguientes:
Métricas de financiamiento
Considerar las métricas de financiamiento permite que la empresa pueda aprovechar el apalancamiento financiero para alcanzar sus objetivos sin necesidad de reducir significativamente el volumen de activos que posee y también le permite obtener ciertos beneficios fiscales. Los resultados arrojados por estas métricas mantendrán alerta a la empresa para que no supere el nivel de riesgo establecido por el mercado. Algunas de estas métricas son: “realizar un análisis exhaustivo de la empresa puede ser el factor determinante para que esta se destaque en el mercado y, más específicamente, en el sector en el que se encuentra”
Para concluir, se podría afirmar que llevar a cabo un análisis detallado de la empresa puede ser el factor decisivo para que esta se destaque en el mercado y, en particular, en el sector en el que opera ya que a través de la información obtenida, con una buena gestión y control, se pueden tomar las mejores decisiones y anticipar situaciones que puedan afectar la continuidad del negocio. En resumen, potenciar los conocimientos con estas herramientas financieras permite a los consultores asegurar que su labor está siendo precisa al elaborar informes financieros o análisis.
